HISTORIA
DE LOS MUNDIALES DE FÚTBOL
MUNDIAL
1978 -
WORLD
CUP 1978 *
PARTE 4
COPA
DO MUNDO 1978
MUNDIAL
SI, MUNDIAL NO, MUNDIAL SI
EAM
'78 El gobierno de Juan
Domingo Perón decidió
en 1974 dejar la organización del mundial bajo la órbita del
Ministerio de Bienestar Social a cargo de José
López Rega,
creando laComisión de Apoyo al Mundial.
Tras
el golpe de Estado a Isabel
Martínez de Perón,
el gobierno dictatorial la reemplazó por el Ente
Autárquico Mundial '78.
El EAM '78, manejado por el almirante Carlos Lacoste,6 quien
dispuso discrecionalmente de los gastos, asumió formalmente la
organización del mundial, relegando a la AFA al
rol de mero asesor.
CAMPAÑA
ANTI-ARGENTINA – UN NUEVO CAPITULO DE POLITICA Y FÚTBOL
El
boicot y la "campaña antiargentina"
Diversas
organizaciones planearon, en 1977, la creación de un boicot contra
la organización del evento, encabezados por los exiliados argentinos
en Europa,
que denunciaron la sistemática violación de los Derechos
Humanos.
Como
contrapartida, la junta militar adujo que las acciones de esos grupos
eran parte de una "campaña antiargentina" realizada por el
terrorismo. La postura de los medios audiovisuales fue sumarse a la
denuncia contra la campaña. La dictadura montó en el altillo de
la ESMA una
oficina de prensa clandestina para estos fines, en la que los propios
detenidos archivaban la información sobre la Argentina que
publicaban los medios extranjeros, y se difundía información
favorable al régimen.
Aunque
se dijo que algunos jugadores se sumaron a la campaña para denunciar
las acciones de la dictadura militar, renunciando a participar del
torneo, esto nunca se comprobó fehacientemente. No obstante, la
presencia del periodismo extranjero que los acompañó fue importante
para la difusión de la lucha de las Madres
de Plaza de Mayo.
FINALMENTE
ARGENTINA ELECTA COMO SEDE
La
sede de esta Copa del Mundo fue elegida el 6 de julio de 1966 en el
35º Congreso de FIFA,
realizado en Londres.7 El
otro candidato era México,
pero al ser elegido para organizar el mundial de 1970 dos años
antes, retiró su candidatura.7 En
ese mismo congreso se determinaron, además, las sedes de los
mundiales de 1974 y 1982, los cuales se disputaron en Alemania
Federal y España,
respectivamente.7
Argentina había
intentado ser anfitrión de la Copa del Mundo en tres
oportunidades: 1938, 1962 y 1970.7 En
1936 fue elegido Francia para
organizar la competición de 1938,7 lo
que derivó en un boicot por
parte de los países sudamericanos, excepto Brasil,
quienes entendían que el tercer campeonato del mundo debía
realizarse en su continente.8 En
1956, en el Congreso celebrado en Lisboa, Chile ganó
la votación para organizar la competencia de 1962, mientras que en
el Congreso de 1964 el elegido fue México, quien fue el anfitrión
en 1970.7
LA
MASCOTA
Símbolos
La
mascota de este mundial fue Gauchito,
el cual fue diseñado gráficamente por Néstor Córdoba,9 de
los estudios de Manuel
García Ferré.10 La
mascota se basaba en el estereotipo de
la imagen del gaucho
argentino.
Era un niño con sombrero
de gaucho, pañuelo al
cuello, rastra a
la cintura, y un talero en
la mano, vestido con la camiseta blanca con franjas celestes
verticales de la selección argentina, pantalón corto negro, medias
blancas con franjas celestes horizontales y botas
de fútbol
MUNDIAL
GAÚCHO- GAUCHITO LA MASCOTA
Se
suponia que la mascota del mundial iba a ser Clemente, quien puso de
moda la costumbre de tirar papelitos cuando salen los equipos, pero
finalmente la eleccion cayo sobre Gauchito, que representa a un chico
con un sombrero gaucho y una fusta en la mano.
Haste
el mundial del 78', se daba la curiosidad que todos los equipos que
en la final convertian el primer gol, serian los campeones, Argentina
corto esa racha.
UN
TANGO DE PELOTA
La mascota de
este mundial fue Gauchito y
la pelota oficial sufrió un cambio revolucionario con la aparición
de la Adidas
Tango.
Esta pelota se convirtió en un clásico del diseño que iba a
perdurar durante cinco mundiales, y contaba con mayor
impermeabilización que los diseños anteriores.
El
balón de la Copa del Mundo fue la Adidas
Tango.
La pelota estaba compuesta por veinte paneles que creaban la
impresión óptica de doce círculos idénticos, y fue diseñada para
resistir mejor condiciones climáticas adversas, como la lluvia.11 Su
diseño fue la base de las pelotas de los cinco mundiales
siguientes: Adidas
Tango España, Adidas
Azteca, Adidas
Etrusco Único, Adidas
Questra y Adidas
Tricolore.11
EL
TEMA DEL MUNDIAL
El
tema oficial se llamó "El Mundial" y fue compuesto
por Ennio
Morricone,
compositor de la música de varios Spaghetti
Westerns deSergio
Leone y Cinema
Paradiso,
entre otras.
Otra
de las canciones conocidas fue "25 millones de argentinos",
compuesta por Martín
Darré,
la cual fue más popular en la Argentina.
EL
COSTO DE LA COPA DEL MUNDO
En
total el Mundial costó al estado argentino al menos 520 millones de
dólares, se construyeron 3 tres nuevos estadios (Córdoba, Mendoza y
Mar del Plata), ademas de las remodelaciones del Monumental de Núñez
y el Amalfitani de Liniers, en Buenos Aires, y el Gigante de
Arroyito, en Rosario, Santa Fé; luego, en España para el Mundial
de 1982se
gastó cerca de la cuarta parte.13 La
cifra fue igualada recién por Italia en 1990.
PREMIOS
MEJOR
JUGADOR JOVEN : ANTONIO CABRINI (ITALIA)
PREMIO
JUEGO LIMPIO : ARGENTINA
DE
“FÚTBOL A SOL Y SOMBRA “ DE EDUARDO GALEANO
“…Participaron
diez países europeos, cuatro americanos, Irán y Túnez. EL Papa de
Roma envió su bendición. Al son de una marcha militar, el general
Videla condecoró a Havelange en la ceremonia de la inauguración, en
el estadio Monumental de Buenos Aires. A unos pasos de allí, estaba
en pleno funcionamiento el Auschwitz argentino, el centro de tormento
y exterminio de la Escuela de Mecánica de la Armada.
Y algunos kilómetros más allá, los aviones arrojaban a los
prisioneros vivos al fondo de la mar.
«Por fin el mundo puede ver la verdadera imagen de la Argentina», celebró el presidente de la FIFAante las cámaras de la televisión. Henry Kissinger, invitado especial, anunció:
—Este país tiene un gran futuro a todo nivel.
Y el capitán del equipo alemán, Berti Vogts, que dio la patada inicial, declaró unos días después:
—Argentina es un país donde reina el orden. Yo no he visto a ningún preso político.
Los dueños de casa vencieron algunos partidos, pero perdieron ante Italia y empataron con Brasil. Para llegar a la final contra Holanda, debían ahogar a Perú bajo una lluvia de goles. Argentina obtuvo con creces el resultado que necesitaba, pero la goleada, 6 a 0, llenó de dudas a lo malpensados, y a los bienpensados también. Los peruanos fueron apedreados al regresar a Lima.
La final entre Argentina y Holanda se definió por alargue. Ganaron los argentinos 3 a 1, y en cierta medida la victoria fue posible gracias al patriotismo del palo que salvó al arco argentino en el último minuto del tiempo reglamentario. Ese palo, que detuvo un pelotazo de Rensenbrink, nunca fue objeto de honores militares, por esas cosas de la ingratitud humana. De todos modos, más decisivos que el palo resultaron los goles de Mario Kempes, un potro imparable que se lució galopando, con la pelambre al viento, sobre el césped nevado de papelitos.
A la hora de recibir los trofeos, los jugadores holandeses se negaron a saludar a los jefes de la dictadura argentina. El tercer puesto fue para Brasil. El cuarto, para Italia.
Kempes fue el mejor jugador de la Copa y también el goleador, con seis tantos. Detrás figuraron el peruano Cubillas y el holandés Rensenbrink, con cinco goles cada uno.”
«Por fin el mundo puede ver la verdadera imagen de la Argentina», celebró el presidente de la FIFAante las cámaras de la televisión. Henry Kissinger, invitado especial, anunció:
—Este país tiene un gran futuro a todo nivel.
Y el capitán del equipo alemán, Berti Vogts, que dio la patada inicial, declaró unos días después:
—Argentina es un país donde reina el orden. Yo no he visto a ningún preso político.
Los dueños de casa vencieron algunos partidos, pero perdieron ante Italia y empataron con Brasil. Para llegar a la final contra Holanda, debían ahogar a Perú bajo una lluvia de goles. Argentina obtuvo con creces el resultado que necesitaba, pero la goleada, 6 a 0, llenó de dudas a lo malpensados, y a los bienpensados también. Los peruanos fueron apedreados al regresar a Lima.
La final entre Argentina y Holanda se definió por alargue. Ganaron los argentinos 3 a 1, y en cierta medida la victoria fue posible gracias al patriotismo del palo que salvó al arco argentino en el último minuto del tiempo reglamentario. Ese palo, que detuvo un pelotazo de Rensenbrink, nunca fue objeto de honores militares, por esas cosas de la ingratitud humana. De todos modos, más decisivos que el palo resultaron los goles de Mario Kempes, un potro imparable que se lució galopando, con la pelambre al viento, sobre el césped nevado de papelitos.
A la hora de recibir los trofeos, los jugadores holandeses se negaron a saludar a los jefes de la dictadura argentina. El tercer puesto fue para Brasil. El cuarto, para Italia.
Kempes fue el mejor jugador de la Copa y también el goleador, con seis tantos. Detrás figuraron el peruano Cubillas y el holandés Rensenbrink, con cinco goles cada uno.”
LA CEREMONIA INAUGURAL DEL MUNDIAL DE ARGENTINA 1978
ALCOHOL
Y DROGAS
El
clima mundialista a veces se presta para muchas cosas, la
concentración de Escocia fue ejemplo de ello con alcohol, diversión
y un caso de doping: Johnstone, pero también con un triunfo para
recordar frente a Holanda y un super golazo de Gemmill.
Escocia
llegó agrandado desde Europa, pero perdió con Perú, Johntson dio
positivo de fencamfamina y se rumoreó que a sus jugadores no se los
podía sacar de los bares y de tomar cerveza. Además, los jugadores
no tenían buena relación con el DT, Mac Leod-
Esta
Copa protagonizou o segundo escândalo de doping da história do
torneio. O meia escocês Johnstone foi
flagrado nos exames antidoping na partida em que sua seleção foi
derrotada pelo Peru por
3x1. Johnstone,
após o anúncio do doping, e de seu desligamento da delegação, fez
as malas, e voltou para casa mais cedo. Depois do episódio, ele
nunca mais foi convocado pela Escócia em
competições internacionais.
EL
PROCESO ARGENTINO –
EL
CICLO MENOTTIMenotti
después de varios Mundiales perdidos y de una gran época de Huracán
que dirigía el Flaco, fue designado nuevo DT de la selección.
Desde octubre de 1974 cuando comenzó su ciclo, diagramó un plan de
trabajo y obligó a los dirigentes a que sea cumplido. Seleccionó
los jugadores, los defendió a muerte y prohibió que se vendieran
jugadores a Europa menores de 25 años.
Así armó su columna vertebral. Fillol en el arco tras la renuncia de Gatti, en la defensa Olguín y Galván –ambos muy rechazados por la prensa- y el capitán Passarella. En el medio, Ardiles –otro muy criticado por la prensa que quería a J.J. López- y Gallego. En la delantera Kempes con su fama de goleador adquirida y distintas variantes para acompañarlo. Un equipo claramente ofensivo
Así armó su columna vertebral. Fillol en el arco tras la renuncia de Gatti, en la defensa Olguín y Galván –ambos muy rechazados por la prensa- y el capitán Passarella. En el medio, Ardiles –otro muy criticado por la prensa que quería a J.J. López- y Gallego. En la delantera Kempes con su fama de goleador adquirida y distintas variantes para acompañarlo. Un equipo claramente ofensivo
Después
de la gran fiesta inauguracional, Argentina comenzó perdiendo ante
Hungría por un mal rechazo de Fillol. Enseguida, Luque de un rebote
tras remate de Kempes igualó el partido. Para el segundo tiempo
ingresaron el Beto Alonso y Bertoni y entre los dos armaron una gran
jugada que significó el gol del triunfo.
El segundo partido fue ante Francia. Comenzó complicado y se terminaba el primer tiempo cuando el árbitro del partido cobró un penal inexistente que Passarella cambió por gol. El equipo jugaba muy mal, y las malas noticias llegaron tras el empate de Platini. El ingreso de Alonso esta vez no dio buenos resultados pero un remate desde afuera de Luque dio tranquilidad a la multitud.
Los tropezones se transformaron en caída ante Italia, que con su catenaccio y duro juego. Bettega tras una buena jugada con Paolo Rossi abrió el marcador, que Argentina jamás pudo modificar. La derrota significaba ser segundo del grupo y tener que jugar en Rosario, el Gigante de Arroyito, la segunda ronda. El 14 de junio ante Polonia, se destapó un hombre clave luego en la conquista: Kempes. Dos goles y figura para el jugador de Valencia, para colmo tocó la pelota con la mano en la línea y evitó el gol, que luego Fillol atajaría el penal a Deyna. Fue triunfo cómodo argentino ante un rival temido.
El segundo partido fue ante Francia. Comenzó complicado y se terminaba el primer tiempo cuando el árbitro del partido cobró un penal inexistente que Passarella cambió por gol. El equipo jugaba muy mal, y las malas noticias llegaron tras el empate de Platini. El ingreso de Alonso esta vez no dio buenos resultados pero un remate desde afuera de Luque dio tranquilidad a la multitud.
Los tropezones se transformaron en caída ante Italia, que con su catenaccio y duro juego. Bettega tras una buena jugada con Paolo Rossi abrió el marcador, que Argentina jamás pudo modificar. La derrota significaba ser segundo del grupo y tener que jugar en Rosario, el Gigante de Arroyito, la segunda ronda. El 14 de junio ante Polonia, se destapó un hombre clave luego en la conquista: Kempes. Dos goles y figura para el jugador de Valencia, para colmo tocó la pelota con la mano en la línea y evitó el gol, que luego Fillol atajaría el penal a Deyna. Fue triunfo cómodo argentino ante un rival temido.
Brasil
era el siguiente escalón, fue un partido aparte. Brasil dominó casi
todo el partido, pero los de Menotti
tuvieron
las mejores oportunidades. El empate por 0-0 no era malo, pero
obligaba golear a Perú en el tercer partido para pasar a la final. Y
así fue, fueron seis goles, aunque por momentos se sufrió (el casi
gol de Oblitas), pero los suficientes para la clasificación. El paso
del tiempo no borró las sospechas de aquella goleada, de hecho la
prensa extranjera, que quería repudiar al gobierno militar que
mandaba en Argentina, dijo que el arquero Quiroga había sido
“comprado”.
A
nueve del final, el achique salió mal y Van der Kherkof entró solo
por la derecha. Su centro cayó en la cabeza de Nanninga para el 1-1
que obligaba al tiempo suplementario. Antes que finalice el primer
tiempo de lo agregado, Kempes volvió a poner en ventaja mientras que
Bertoni lo liquidó. Antes, se tuvo que pasar por la famosa jugada
que pegó en el palo y enmudeció al estadio. Holanda que no había
contado con Cruyff (se negó a jugar en Argentina por su presente
político) se quedaba en la puerta del título nuevamente con un gran
equipo, el equipo al que se lo consideró el gran perdedor del
Mundial. “Tenían dos cosas fundamentales: el pressing y la
constante fabricación de espacios” describió Menotti.
EL
RETORNO DE FRANCIA A LOS MUNDIALES Francia
fue otro de los que pensaba llegar más lejos de lo que llegó. Con
Platini como bandera, hizo unas excelentes eliminatorias, pero se
quedó afuera en la primera ronda. A pesar de todo, los franceses
tuvieron varios datos interesantes: fue el único que utilizó los 22
jugadores, el primer gol del campeonato y el más rápido de los
partidos. Además, jugó con la camiseta de Kimberley de Mar del
Plata porque tenía la misma camiseta que Hungría…
TAL
VEZ SI FUESE PAULISTA O CARIOCA
Lo
cierto que el mayor crack del Brasileirao por aquellos tiempos quedo
fuera del Mundial, Claudio Coutinho decidió no llevar al jugador del
Internacional de Porto Alegre Paulo Roberto Falcao optando en el caso
por Chicao.
PRIMER
TRIUNFO AFRICANO EN MUNDIALES
Tunez
consiguió el primer triunfo de un equipo africano en la historia
de la Copa del mundo. Venció por 3-1 a México.
NÚMEROS
DISTRIBUIDOS ALFABETICAMENTE
Distribución
por orden alfabético: De los números en la selección Argentina,
por eso el Nº 1 fue usado por Ardiles y por Bertoni.
GOLAZOS
DEL MUNDIAL 78
Golazos
: El de Luque al ángulo frente a Francia , el de Christian López de
Francia contra Hungría , el de Gemmill de Escocia contra los
holandeses.
El
de Luque al ángulo frente a Francia , el de Christian López de
Francia contra Hungría ,de Repp (Holanda) como dicen los
españoles tremenda vaselina frente a Austria tras jugada de
habilidad de Resenbrik, Arie Haan bombazo de afuera del área para
Holanda frente a Alemania, lo repitió frente a Italia , de Dirceu de
Brasil tiro libre al ángulo frente a Perú, Dirceu y Nelinho de
Brasil frente a Italia en la disputa del tercer lugar .
UNA
DE CAL, OTRA DE ARENA
Gol
a favor y en contra : Lo hizo el holandés Brandts en el partido
Holanda x Italia .
EL
MUNDIAL DE KIMBERLEY
Kimberley
Mundialista : Por tener camisetas parecidas Francia debió utilizar
una camiseta secundaria en el partido frente a Hungría, como no la
tenían pidieron prestadas al club porteño Kimberley (camisetas
verdes y blancas a rayas) .
BAJO
SOSPECHA
Análisis
de un 6 a 0 sospechosos :
Mirando
los goles nos pareció que el primer gol de Kempes fue bien, el
segundo de Tarantini de cabeza también, el tercero si fue sospechoso
Kempes definió solo, el cuarto de Luque también fue sospechoso
Luque cabeceo solo sobre la línea, el quinto de Kempes fue bien y el
sexto de Luque fue un error bobo de la defensa peruana.
EL
NARCOTRAFICO TAMBIÉN ANDUVO METIDO
Fernando
Rodríguez Mondragón,
filho de um chefe do tráfico de drogas Colombiano, declarou
em 2007 à Rádio
Caracol (Colômbia)
que o desarticulado cartel
de Cáli
subornou a seleção do Peru, com uma cifra não revelada, para que
deixasse a seleção da Argentina ganhar o decisivo jogo da segunda
fase. A Argentina se classificou tendo os mesmos pontos que o Brasil,
mas com melhor saldo de gols.
CALLANDO
MANIFESTANTES
Houve
rumores de que a Ditadura Militar argentina desejava o título a todo
custo, o que segundo algumas pessoas, explicaria boa parte dos
episódios estranhos ocorridos durante a Copa. A comemoração da
imensa torcida argentina pela vitória de 6x0 sobre o Peru serviu
para acabar com os protestos das Mães
da Praça de Maio,
que buscavam informações dos filhos desaparecidos, pois os mesmos
haviam feito vários protestos contra o governo militar do país.
EL
“PLAN CONDOR” Y LA COPA DEL MUNDO
Se
trata del polémico partido que le permitió a la selección
argentina acceder a la final de la Copa del Mundo de 1978. Sobre el
resultado, 6-0 a favor de los anfitriones, se han tejido muchas
versiones.
“El
exsenador peruano Genaro Ledesma Izquieta declaró ante el juez
argentino Norberto Oyarbide. Había sido secuestrado y trasladado a
la Argentina junto a otras 12 personas. (Jorge Rafael) Videla
había aceptado recibirlos como prisioneros de guerra a cambio del
resultado”, señala el diario “Tiempo Argentino”.
“Videla
necesitaba ese triunfo para limpiar la mala imagen de Argentina en el
mundo”, agrega el matutino. Según la declaración de Ledesma, el
resultado de aquel partido fue producto de un pacto entre Morales
Bemúdez y Videla en el marco de dicha operación, que era un
instrumentó para asesinar y desaparecer a miles de opositores a las
dictaduras de Argentina, Chile, Brasil, Bolivia, Paraguay y Uruguay.
El
Mundial de 1978 en Argentina quedó marcado en la historia bajo la
sombra de la sospecha. El campeonato celebrado en el país
sudamericano sumido en ese momento en una dictadura, propició todo
tipo de dudas y leyendas en torno a como Argentina, país organizador
logró la victoria. En plena época de dictadura de Videla, el país
argentino había sido designado como sede del Mundial 78, lo que
significaba una oportunidad de oro para el régimen de dar a conocer
las bondades del estado sudamericano. Mito o realidad lo cierto es
que el 21 de junio de 1978 permanecerá para siempre en los anales de
la historia del fútbol por la sospechosa goleada por 6-0 de
Argentina a Perú
Con
un equipo brillante encabezado por Mario Alberto Kempes y Daniel
Pasarella en el campo, y con Cesar Luis Menotti al mando de las
operaciones desde el banquillo, Argentina, sin embargo, no estaba
respondiendo a las expectativas y su trayectoria estaba siendo algo
más que irregular. Tras acabar la primera fase segunda de su grupo
por detrás de Italia, los albicelestes estaban encuadrados con
Polonía, Brasil y Perú en la segunda ronda del torneo (en aquel
torneo no hubo semifinales y el primero del grupo pasaba directamente
a la gran final). Tras ganar a los polacos por 2-0 en la primera
jornada de la segunda fase, y empatar a 0 con Brasil, el acceso al
partido definitivo dependía de una victoria por cuatro o más goles
ante Perú, última del grupo y ya sin posibilidades.
Sin
embargo, no iban a ser cuatro, sino seis los goles que Argentina le
iba a hacer a los andinos. Con el estadio Lisandro de la Torre de
Rosario lleno hasta la bandera, el descanso acabó con un 2-0 que
prometía una segunda parte llena de emoción después de dos palos
peruanos. En la reanudación, la pasividad de la línea defensiva (
no se pierdan los goles argentinos) fue más que notoria lo que
permitió a los albicelestes redondear la goleada con cuatro tantos
más, que daban el pase a la gran final a Argentina
Las
consecuencias del partido como no podía ser de otra forma fueron
tremendas. A nivel deportivo, Argentina se clasificó para su para la
final, que acabaría ganando a Holanda. A nivel político, 15 días
después de acabar el Mundial, la Junta Militar argentina donó
35.000 toneladas de grano de trigo a Perú, además de descongelarle
una línea de crédito de 50 millones de dolares. Las vinculaciones
al Plan Cóndor (que tenía por objetivo ayudar a las dictaduras
latinoamericanas de la época) fueron más que importantes.
A
nivel personal, Roberto Rojas, defensa titular en aquel encuentro y
suplente por norma general, murió de forma extraña tras un
accidente automovilístico al chocar su coche contra un poste. Misma
mala fortuna, tuvo el entrenador de aquella selección, Marcos
Calderón, que vio como perdía su vida al caer el avión en el que
se encontraba. Casualidades o no, lo cierto es que nunca se pudo
demostrar que aquel encuentro estuviera amañado. Sin embargo, el
cúmulo de circunstancias que rodearon al encuentro dieron y darán
que hablar durante muchos años.
La
sombra del amaño también estuvo presente en el Mundial de
Argentina’78. La polémica comenzó cuando la FIFA obligó a Brasil
a jugar tres horas antes que Argentina el último partido de la
segunda fase. Ambas selecciones estaban empatadas a puntos, por lo
que el pase a la final se iba a decidir por el gol average general.
Brasil
presentó una reclamación ante el Comité Organizador por la
diferencia horaria entre los dos partidos pero su protesta fue
rechazada. Brasil ganó 3-1 a Polonia, por lo que Argentina ya sabía
antes de saltar al Estadio Lisandro de la Torre en Rosario que debía
ganar a Perú por al menos cuatro goles de diferencia si quería
jugar la final del Mundial y dejar a la canarinha como segunda de
grupo.
Según
cuenta David Yallop en su libro ¿Cómo robaron la Copa?, Videla
ordenó al capitán Carlos Lacoste, organizador del Mundial, amañar
el resultado con Perú. Para ello, Lacoste se puso en contacto con
tres antiguos oficiales que viajaban con la selección de Perú y les
ofreció un millonario soborno: 50 millones de dólares y 35 mil
toneladas de grano. Argentina goleó a Perú sin ninguna oposición
en un partido que ya estaba decidido de antemano. Además, dio la
casualidad que el portero de Perú era 'Chupete' Quiroga, un
argentino nacionalizado peruano, lo que aumentó las sospechas de
amaño.
Tras
el Mundial, el Secretario de Hacienda de la dictadura, Juan Alemann,
confirmó las 'donaciones' argentinas realizadas al pueblo peruano.
"Ese tipo de donaciones no son espontáneas. Se realizan sólo
en caso de terremoto, de alguna catástrofe", aseguró. Con
otras palabras, esa 'donación' evitó la catástrofe de ver cómo
Argentina quedaba eliminada de su Mundial.
ALGO
MÁS QUE UNA GOLEADA
El
partido finalizó 6 a 0 a favor de argentina y con grandes dudas para
los espectadores del mundo entero, ya que los peruanos (quienes
durante la primera ronda había empatado sin goles frente a Holanda)
no habían ofrecido en aquél partido resistencia alguna. Tanto fue
así que los mismos jugadores fueron apedreados al llegar al
aeropuerto de Lima.
Luego trascendió la versión de que el gobierno argentino habría negociado el partido con sus pares peruanos, a la semana del partido varios barcos cargados con 35 mil toneladas de trigo partieron hacia Lima, y el gobierno peruano, presidido por el dictador Francisco Morales Bermúdez, recibió un préstamo por parte de Argentina de 50 millones de dólares sin interés, todo esto como marco del Convenio Sobre Ayuda Alimentaria, también se pagaron grandes sobornos a funcionarios peruanos desde cuentas manejadas por la Armada argentina.
El trato lo habría realizado Lacoste con tres antiguos oficiales peruanos que acompañaban a su seleccionado en su estadía en la Argentina. Además se transfirieron grandes sumas de dinero a varios dirigentes peruanos desde la cuenta corriente de la marina argentina. Sin que una cosa quite la otra, también se comentó que había un pozo a repartir entre los futbolistas peruanos de 250.000 dólares si perdían por más de cuatro goles.
También Chumpitaz, recuerda la visita de Videla al vestuario: “... nos sorprendimos cuando nos dijeron que nos iba a hablar Videla. Se paró frente a nosotros y nos dio un discurso en el que se llamaba a la hermandad latinoamericana y nos deseaba suerte. Yo no lo tomé como una presión, aunque después de lo que nos habían dicho las organizaciones de derechos humanos, Videla aparecía como un personaje que nos daba un poco de miedo ...”.
En aquella oportunidad Jorge Rafael Videla cerró su inolvidable discurso en el vestuario peruano con la siguiente frase: “... Latinoamérica los está observando ...”, como si Brasil quedara en Asia.
Luego trascendió la versión de que el gobierno argentino habría negociado el partido con sus pares peruanos, a la semana del partido varios barcos cargados con 35 mil toneladas de trigo partieron hacia Lima, y el gobierno peruano, presidido por el dictador Francisco Morales Bermúdez, recibió un préstamo por parte de Argentina de 50 millones de dólares sin interés, todo esto como marco del Convenio Sobre Ayuda Alimentaria, también se pagaron grandes sobornos a funcionarios peruanos desde cuentas manejadas por la Armada argentina.
El trato lo habría realizado Lacoste con tres antiguos oficiales peruanos que acompañaban a su seleccionado en su estadía en la Argentina. Además se transfirieron grandes sumas de dinero a varios dirigentes peruanos desde la cuenta corriente de la marina argentina. Sin que una cosa quite la otra, también se comentó que había un pozo a repartir entre los futbolistas peruanos de 250.000 dólares si perdían por más de cuatro goles.
También Chumpitaz, recuerda la visita de Videla al vestuario: “... nos sorprendimos cuando nos dijeron que nos iba a hablar Videla. Se paró frente a nosotros y nos dio un discurso en el que se llamaba a la hermandad latinoamericana y nos deseaba suerte. Yo no lo tomé como una presión, aunque después de lo que nos habían dicho las organizaciones de derechos humanos, Videla aparecía como un personaje que nos daba un poco de miedo ...”.
En aquella oportunidad Jorge Rafael Videla cerró su inolvidable discurso en el vestuario peruano con la siguiente frase: “... Latinoamérica los está observando ...”, como si Brasil quedara en Asia.
EL
MUNDIAL DE VIDELA
La
goleada propinada por Argentina frente a Perú por 6-0 en el Mundial
de 1978 siempre ha estado bajo sospecha, ahora mucho más luego que
el ex senador peruano Genaro Ledesma Izquieta declaró que el
entonces dictador argentino, Jorge Videla, había aceptado recibirlo
a él y a otros 12 conciudadanos como “prisioneros de guerra” con
la condición de que la selección en la que brillaba Cubillas se
dejara golear por la de Mario Kempes para permitir el acceso de la
albiceleste a la final, según informa el diario El
País de España.
Según
el periódico “era un 25 de mayo de 1978 cuando los 13 opositores
al entonces dictador peruano, Francisco Morales Bermúdez
(1975-1980), fueron trasladados en un avión militar de su país a un
regimiento de Jujuy, al noroeste de Argentina. Allí llegaron sin
DNI, pasaporte, muda de ropa o dinero. Después los trasladaron a
Buenos Aires, donde fueron alojados en centros clandestinos de
detención. “Nuestros familiares avisaron a las delegaciones de
derechos humanos”, atestiguó en Perú Ledesma, ex senador de
Izquierda Unida, ante emisarios del juez de Buenos Aires Norberto
Oyarbide, según publicó ayer el periódico Tiempo Argentino. “Desde
París hubo un emplazamiento al Gobierno argentino para que nos
dejara en libertad, a lo que el Gobierno argentino se negó. Ante la
insistencia de París, el Gobierno de Videla aceptó ponernos en
libertad a condiciones de que Francia comprara nuestros pasajes”,
añadió Ledesma.
“Al
salir a Francia nos salvamos del lanzamiento que Morales Bermúdez y
Videla habían acordado, que era el lanzamiento de una persona al mar
desde un avión en vuelo, por lo que no quedaba resto alguno“, dijo
Ledesma refiriéndose a los llamados vuelos de la muerte en los que
la dictadura argentina (1976-1983) hacía desaparecer a los
opositores. Videla los había aceptado “como prisioneros de guerra
con la condición de que Perú le permita el triunfo de Argentina en
el campeonato mundial de fútbol, porque esto tenía importancia para
Videla: necesitaban ese triunfo para limpiar la mala imagen de
Argentina en el mundo”, añadió Ledesma. Fuentes del juzgado de
Oyarbide informaron a EL PAÍS de que un periodista peruano también
atestiguó la misma versión.
Aquel
6 a 0 en la segunda fase del Mundial de 1978 se jugó el 21 de junio,
casi un mes después del secuestro de los 13 opositores y antes de su
liberación. Argentina debía ganar a Perú por cuatro goles de
diferencia para superar en el grupo a Brasil y clasificarse para la
final frente a Holanda. La selección local venció por 3 a 1 a la
holandesa y se consagró campeona del mundo por primera vez. Diversas
investigaciones periodísticas reconstruyeron denuncias de presuntos
sobornos y extorsiones a ciertos jugadores peruanos para dejarse
golear. Además, ese año la dictadura de Videla concedió a la de
Morales Bermúdez un préstamo y un cargamento de 14.000 toneladas de
trigo, informa El País.
EL
ARREPENTIMIENTO DE PASARELLA
"Hoy
todavía me arrepiento de haber jugado el Mundial del '78: si hubiera
sabido exactamente lo que pasaba, si hubiera tenido el aplomo que
tengo hoy, a mi edad, no hubiese jugado esa Copa del Mundo. Eramos
jovencitos, nos hemos enterado después de lo que pasaba. Hace algún
tiempo tuve la desgracia de perder un hijo de 18 años y sé lo que
eso significa. Hoy pienso que muchos padres y madres han perdido a
sus hijos mientras nosotros jugábamos la Copa del Mundo. Lo que me
pasó a mí fue una desgracia; lo que les pasó a aquellos padres y
madres fue premeditado. Hoy en día no participaría de una Copa del
Mundo".
La
declaración es de Daniel Alberto Passarella, el entrenador de la
Selección Argentina y fue publicada en el semanario France Foot
Ball, el 3 de marzo de 1998.
El
autor de la nota, el periodista francés radicado en la Argentina
Francis Huertas, recuerda que la charla tuvo lugar en Mar del Plata,
antes de uno de los partidos preparatorios jugados por la Selección
Argentina. "Le pregunté a Passarella cómo se sentía al haber
jugado un Mundial bajo el yugo de los militares y me dio esa
respuesta, que publiqué textualmente. Luego le marqué a Passarella
que era muy fuerte lo que estaba diciendo y creo que no entendió
bien. Se puso a la defensiva, suponiendo que lo estaba acusando",
dice hoy Huertas, al evocar aquella nota.
Eduardo
Bongiovanni, el coordinador de la Selección Nacional, también
presente en esa charla en Mar del Plata, ratificó que Passarella
había dicho que si hubiera sabido lo que pasaba no jugaba el
Mundial. Sin embargo, el intento de hablar del tema con Passarella en
Burdeos no pudo concretarse porque, según Bongiovanni, estaba muy
metido en el partido contra Croacia. "Sé que Daniel dijo que el
Mundial le traía recuerdos tristes y alegres" ,expresó el
coordinador del Seleccionado Nacional.
En
la nota de France Foot Ball, antes de referirse a la cara oscura
del Mundial '78, Passarella, que era el capitán del conjunto
nacional y algo así como el lugarteniente de Menotti, había
señalado que el título de hace 20 años en Argentina se logró "por
la fuerza de un grupo que tenía hambre de gloria".
Los
futbolistas de la actual Selección Argentina, que comanda
precisamente Passarella, eran niños en 1978. Diego Simeone, que
tenía 8 años recién cumplidos, recuerda que su padre fue a la
cancha a ver la final y que lo llevó después a festejar el título
por las calles. "Estaba muy feliz, tengo muy presente el partido
en el que había que ganarles por goleada a los peruanos y también
me acuerdo que en el medio de los festejos me robaron una camiseta
que llevaba en las manos." Germán Burgos, quien con sus 9 años
cursaba el cuarto grado del colegio primario en el '78, se
enorgulleció de haber visto el primer gol del Mundial, el del
francés Bernard Lacombe, en un partido contra Italia. "Eso fue
en Mar del Plata, mi ciudad natal, pero yo no estaba en la cancha, lo
vi por televisión, en blanco y negro." Enseguida agregó:
"Eramos pobres..." y arrancó las sonrisas de sus
compañeros en la conferencia de prensa múltiple del plantel, el
martes pasado. Ninguno de los componentes del plantel nacional vio en
la cancha los partidos del Mundial de Argentina. Los más grandes,
Roberto Sensini y Abel Balbo, tenían 12 años; el menor, Marcelo
Gallardo, sólo 2.
Hace
un tiempo, René Orlando Houseman, que tiene un cuñado desaparecido,
coincidió con Passarella en que no hubiera jugado el Mundial del '78
de haber sabido lo que estaba pasando. Mario Alberto Kempes por su
parte, estaba jugando en Valencia, España, antes del Mundial.
Aseguró que leía noticias de la Argentina en los diarios europeos,
pero creía que eso que decían no era verdad. "Después, con el
tiempo, cuando se hizo el juicio a los militares, pude comprobar que
todo lo que publicaban era cierto." Del plantel argentino de
aquel entonces, el único que se automarginó fue
Jorge
Carrascosa. Nunca explicó abiertamente cuáles fueron las razones
que lo impulsaron a no jugar el campeonato, pero siempre se sospechó
que estaban vinculadas al conocimiento que tenía sobre la brutal
represión desatada por el gobierno militar encabezado por Jorge
Rafael Videla que usurpó el gobierno en 1976. "Jorge no quiso
ser cómplice y tampoco explicó nada por respeto a sus compañeros",
aseguran quienes lo conocen a Carrascosa.
El
Mundial del '78 será siempre, y por encima de cualquier otra
consideración, el Mundial de los Desaparecidos. La imagen de Kempes
en cualquiera de sus goles, la de Fillol en sus voladas o la de
Passarella con la copa en las manos quedará opacada,
invariablemente, por ese símbolo de la dictadura militar más
sangrienta de nuestra historia que registraron los fotógrafos del
mundo: el festejo de la junta, el pulgar en alto del asesino Videla.
Lo demás es secundario, apenas una anécdota, como las que contaron
más de una vez algunas Madres de Plaza de Mayo, aquello de que ellas
lloraban en la cocina y sus maridos gritaban los goles en el comedor.
Esta pretenciosa nota técnica es por lo tanto, secundaria,
complementaria, prescindible. Hechas las advertencias del caso, se
podrá seguir con la lectura del análisis puramente futbolístico.
La
final del Mundial 78, como se sabe, la jugaron Argentina y Holanda.
Los dos equipos, con otros jugadores, en otras circunstancias se
habían enfrentado en el Mundial de Alemania, cuatro años antes, en
un 0-4 que no se borrará fácilmente. Curiosamente, Argentina y
Holanda, dos de los equipos que aquí le han sacado brillo a sus
chapas de candidatos podrían volver a cruzarse en el Mundial de
Francia. Los mojones del '74 y el '78 son válidos para referenciar
las perspectivas de hoy.
Se
sabrá perdonarme la primera persona, pero no hay otro modo de
explicar las vivencias de aquel partido en Gelsenkirchen, contra los
holandeses. Tengo grabado el baile, la impotencia de los jugadores
argentinos corriendo detrás de las camisetas anaranjadas, la voz del
querido Osvaldo Ardizzone, enviado de El Gráfico, preguntando
cada cinco minutos "falta mucho, nene, para que se acabe este
oprobio", la historia que contó Roberto Perfumo pidiéndole al
arquero Daniel Carnevali que no se apurara en los saques de arco para
no engordar la goleada, los holandeses que ocupaban la tribuna de
enfrente impacientándose a cada tanto porque no llegaban más goles
e inmediatamente complacidos.
Vale
este ejemplo: Argentina-Jamaica me hizo acordar mucho a aquel baile.
Argentina era Holanda y Jamaica, Argentina. Algo así. O tal vez
peor, porque los jamaiquinos en el Parque de los Príncipes alguna
vez se acercaron a Roa y Babington; el Ratón Ayala o Yazalde no le
hicieron ni cosquillas a Jongbloed. Holanda tenía a Cruyff, a Van
Hanegem, a Neskeens, a Rep, a Resenbrink. "Nunca podremos
jugarles de igual a igual a estos tipos", seguramente escribí.
Cuatro
años más tarde, Argentina le ganó a Holanda la final de un
mundial. No estaban Cruyff ni Van Hanegem, pero sí la mayoría de
los otros y los temibles mellizos Van de Kerkhof. Entre un mundial y
otro pasó César Luis Menotti, que también había estado en
Alemania en carácter de técnico con intenciones de perfeccionarse.
Hasta sus más firmes detractores no podrán dejar de reconocerle a
Menotti el giro futbolístico que les dio a las selecciones
nacionales. El cambio principal pasa por lo psicológico: el Flaco
creyó siempre en los jugadores argentinos, en su real capacidad
futbolística y logró que lo entendieran con un mensaje tan simple
como seductor. Consiguió que la selección fuera, como se había
proclamado vanamente otras veces, prioridad 1.
El
equipo que fue armando tenía la idea del juego como una bandera y el
Brasil del '70, como línea de referencia. Un solo dato lo certifica;
la selección del '78 tenía en su plantel a Kempes, Alonso, Villa,
Larrosa y Valencia. ¡Cinco números 10! Aquel equipo jugaba un 4-3-3
elastizado por las apariciones en ataque de Kempes, las subidas de
Olguín por el lateral, las de Tarantini cruzando toda la cancha. No
fue, sin embargo, todo lo brillante que podía fantasearse (mucho más
técnico fue el Juvenil del '79, con Barbas, Díaz y Maradona), sí
resultó un equipo sólido, con una personalidad avasallante.
Sostenido del medio hacia atrás por Gallego, Galván, Passarella y
Fillol, intentaba múltiples variantes de ataque. Aquella selección
del '78 dejó el camino abierto para que en el '86, bajo el influjo
de Maradona, llegara el título más brillante del fútbol argentino.
Podrá decirse que todo empezó en el '78; en realidad la explicación
debe pasar por la esencia misma del jugador argentino que fue lo que
se logró rescatar. Hoy, en el nuevo paisaje del fútbol mundial, en
el que se le asigna a la táctica una exagerada importancia, en el
equipo de Passarella hay un solo 10, Gallardo y dos mitad 9, mitad
10, puesto rebautizado como "enganche", que son Ortega y
Berti.
Hoy,
tácticas al margen, Argentina sabe que puede jugar de igual a igual
con Holanda o con cualquiera de los equipos que toquen en el Mundial.
Se puede ganar o perder, pero hoy, el jugador argentino tiene la
posibilidad de creer y esa confianza no se sustenta en la soberbia
sino en la historia y en las fuentes.
LA
OFERTA BRASILEÑATanto
Chumpitaz como Manso estuvieron de acuerdo y reconocieron que fueron
incentivados por algunos brasileños, quienes les ofrecieron 5 mil
dólares para cada uno, unas vacaciones en Itaparica y hasta hubo
promesas de grandes extensiones de tierra. Tan solo debían ganar,
empatar o perder por menos de cuatro goles de diferencia, cosa que no
lograron.
La ecuación es sencilla, 20 ofrecieron los argentinos y es el cuádruple de 5.
Pero Perú perdió 6 a 0 contra la selección Argentina y de esa forma el seleccionado brasileño quedó eliminado del torneo sin haber perdido un solo partido, ni un solo centavo.
A Brasil no lo dejó afuera del torneo los seis goles argentinos a Perú, sino el árbitro que los dirigió en el partido que disputaron frente a su par de Suecia, en el empate en un tanto.
Cuando se jugaba ya el tiempo de descuento de dicho encuentro, el juez pitó el final del partido justo cuando Zico de cabeza le daba el triunfo al seleccionado carioca. Ni un minuto más ni uno menos.
Luego de la eliminación de Brasil, fanáticos cariocas que habían llegado a la Argentina para alentar a su selección, quemaron un retrato de Claudio Coutinho, entrenador del seleccionado.
La ecuación es sencilla, 20 ofrecieron los argentinos y es el cuádruple de 5.
Pero Perú perdió 6 a 0 contra la selección Argentina y de esa forma el seleccionado brasileño quedó eliminado del torneo sin haber perdido un solo partido, ni un solo centavo.
A Brasil no lo dejó afuera del torneo los seis goles argentinos a Perú, sino el árbitro que los dirigió en el partido que disputaron frente a su par de Suecia, en el empate en un tanto.
Cuando se jugaba ya el tiempo de descuento de dicho encuentro, el juez pitó el final del partido justo cuando Zico de cabeza le daba el triunfo al seleccionado carioca. Ni un minuto más ni uno menos.
Luego de la eliminación de Brasil, fanáticos cariocas que habían llegado a la Argentina para alentar a su selección, quemaron un retrato de Claudio Coutinho, entrenador del seleccionado.
BAJO
SOSPECHA II
Mundial
de las sospechas si los hubo (confirmadas o no). Durante el
transcurso del torneo, hubo protestas de los tecnicos de Hungria,
Francia, Polonia, Brasil y del capitan de la seleccion holandesa,
(practicamente todos los rivales) siempre por el mismo motivo,
supuesto favorecimiento de parte de los arbitros para con el equipo
local.
SIN
PIEDAD CON LA PATRIA
Goleando
a su propio país: Así fue para el entrenador de Holanda el
austriaco Ernst Happel en la goleada propinada por los holandeses a
Austria.
CRECIENDO
CON EL TORNEO
Curiosidades: Argentina,
Holanda y Brasil, mejores tres del certamen terminaron segundos en la
fase
LARGA
ESPERA
La
Argentina era desde 1934 que queria organizar un Mundial, le llego el
turno (por fin!) en 1978.
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